Los prehistóricos eran violentos, carroñeros y caníbales pero también solidarios

¿Y cómo eran físicamente los prehistóricos?

Los esqueletos de los homínidos del Paleolítico nos cuentan que eran top models de pasarela, afirma Arsuaga. Altos, guapos y estaban contentos. Eran muy altos tanto ellos como ellas con cuerpos atléticos. Además se acicalaban mucho, lo sabemos por la gran cantidad de fragmentos de adornos hechos con huesos, plumas…que se encuentran en los suelos de cuevas y galerías Y de estos fragmentos también deducimos que eran alegres, con la autoestima alta. Eran presumidos. También sabemos que se tatuaban, comenta el codirector de Atapuerca.

En el Neolítico, cuando aparece la Agricultura y la Ganadería, la cosa cambia. El homínido ya es de una estatura inferior, como se mueve menos, su cuerpo deja de ser ágil y se redondea. Su oficio ahora es granjero. Son más esclavos del tiempo, tienen enfermedades articulares como artrosis. También del análisis de los huesos de Atapuerca se desprende que tenían una alimentación menos variada y por tanto algo de desnutrición.

Así murió Sara, Sarita, una adolescente cuyos restos se dieron a conocer en 2018 procedentes de la Sima de los Huesos. Lugar que, si bien se ha considerado durante mucho tiempo como el primer enterramiento humano de hace 500.000 años de antigüedad; recientes conclusiones estadísticas con aplicación de la Inteligencia Artificial, ponen en duda que sea un enterramiento humano tal y como lo comprendemos hoy. Junto a otros 27 cuerpos encontraron a Sara. Murió de hambre y fue devorada por otros homínidos.

Dejaron de pintar

También dejaron de pintar. Quizá, es una opinión de Arsuaga, el hombre de nuestro planeta que más sabe de evolución humana: porque cambió su concepto de naturaleza, han dejado de vivir en los árboles, ya no son nómadas. Hubo un cambio de paradigma, desde luego

Cazaban bisontes en grupos

Los restos de fósiles de bisontes en gran cantidad que han aparecido en el yacimiento de Atapuerca, la Gran Dolina, sustenta la conclusión de que el Homo Antecessor Cazaban en grupo algo que requiere un gran desarrollo cerebral incluyendo el habla y la comunicación en grupo. También, al ser una gran cantidad de carne, ésta se distribuiría entre los cazadores, lo cual implica una sólida organización social.

La caza se realizaría a finales de la primavera y principios del otoño, coincidiendo con los movimientos migratorios de estos animales.

Morían principalmente de hambre e hibernaban. También hay restos fósiles de actos violentos.

La vida en la Prehistoria no era en absoluto idílica. La mayoría de los homínidos morirían, como lo hacen actualmente los mamíferos salvajes, de hambre. Así se concluye de los datos recogidos de las excavaciones de la Sima de los Huesos. Sobre todo en invierno, cuando la naturaleza se congela, se apaga. El 80% de la energía gastada se destinaba  en aguantar hasta la primavera. Se han descubierto rastros en Atapuerca de hibernación de homínidos.

Además afirma Arsuaga, los neandertales eran violentos. Así se desprende de dos cráneos. El primero, el número 5 llamado Miguelón en honor a Miguel Induráin, tiene un golpe en la cara que le fracturó el cráneo. También el cráneo 17 tiene dos agujeros producidos por un pico. Al ser doble, se deduce que no se lo pudo haber hecho él mismo.

Canibalismo

En los restos descubiertos en Atapuerca hay varios con signos de haber sido víctimas de canibalismo por las incisiones en el hueso de herramientas humanas. El caso más destacable quizás sea nuestra Sara, Sarita, adolescente no mayor de 13 años, tatuada, que murió hace 300.000 años. Cuyo cráneo, el número 16 de la Sima de los Huesos, ha sido meticulosamente restaurado a lo largo de varias excavaciones, han llevado mucho tiempo. Esta joven ‘Homo heidelbergensis’, moriría seguramente de inanición, de hambre. Y su cuerpo fue devorado por otros homínidos. Según se deprende de las marcas de dientes homínidos en sus huesos.

Esta práctica era común, sobre todo en tiempos de guerras para hacerse con territorios más ricos en recursos.

La Sima de los Huesos y la solidaridad del homínido que habitó en Atapuerca

También en el yacimiento de la Sima de los Huesos se han encontrado restos de un anciano y de una niña con discapacidad, evidenciando que existía robusta organización como sociedad. Y una necesaria comprensión de quelos unos cuidan de los otros. Porque tanto el anciano como la joven no hubieran sobrevivido sin la ayuda de los otros.

Y es curioso destacar que la esperanza de vida de los homínidos prehistóricos no era muy inferior a la de las poblaciones de finales del siglo XVI en España. Sobre unos 40 años.

Y La importancia de la aguja de coser

Juan Luis Arsuaga se pone serio al afirmar que uno de los mayores inventos de la Prehistoria fue la aguja de coser realizada en hueso. Pensemos que somos una especie sin vello en la mayor parte de nuestro cuerpo. Y que estamos expuestos a las inclemencias de los cambios de estación: primavera, verano, otoño e invierno. Al frío del invierno y al sol abrasador en verano. Si no hubiéramos podido confeccionar vestimentas con las pieles de los otros animales en la Prehistoria, no podríamos haber salido de las cuevas. De ahí su importancia básica revolucionaria. Cuando supimos puntear dos pieles y cubrir nuestros cuerpos, pudo empezar la época de los exploradores. Antes hubiera sido imposible.

La alimentación

La importancia de comer el tuétano

Los homínidos de Atapuerca, se alimentaban de todo. Eran omnívoros, carroñeros y cazadores. También es muy importante el consumo del tuétano del interior de los huesos por la gran cantidad de grasa buena, además de vitaminas y minerales como hierro, vitamina A, fósforo, magnesio, calcio y zinc. Esto debió de ser fundamental e incluso podría ser una base que justificaría el aumento de tamaño del cerebro en el hombre neandertal. Los sesos están formados esencialmente proteínas.

Los neandertales como decimos, eran muy carnívoros y fueron ellos los primeros en consumir la médula del hueso. Esa conclusión ha sido extraida de la aplicación de Inteligencia Artificial (IA). Basándose en el análisis de la gran cantidad de astillas presentes en el suelo de las cuevas. Y robándole el protagonismo a la hiena que no fue el primer animal en consumir tuétano.

Los neandertales son los homínidos con el cerebro más grande, a partir de él el tamaño de éste comienza a disminuir. En el hombre moderno, es prácticamente igual el tamaño del cerebro del niño que del adulto. Hay quién habla de la gamificación de nuestra sociedad, por el gran apego al entretenimiento, esparcimiento y recreo del hombre actual.

Rasguños en los dientes

Otra deslumbrante aplicación científica que se está desarrollado en Atapuerca es el análisis de las huellas o rasguños de los dientes. A través de estas marcas, el equipo de Paleontólogos expertos pueden extraer datos  para conocer de qué se alimentaron los homínidos en cuestión en su última semana de vida.

Se han descubierto  herramientas para limpiar los dientes.

NOTA En la novela “La vida contada por un sapiens a un neandertal” de Juan Luis Arsuaga y Juan Millás se desarrollan otras muchas cuestiones sobre Paleontología.

Fuente: Fundación Atapuerca. Disponible en <https://www.atapuerca.org/&gt; [Consulta: septiembre 2021]

ebiblio <https://castillayleon.ebiblio.es/ >

Millás, el ingenuity hacedor de articuentos.

Paleontologización

En la novela “La vida contada por un sapiens a un neandertal” de Juan José Millás y Juan Luis Arsuaga, el personaje alter ego de  Juan José Millás permanece observando y  escuchando. Fascinado por el maestro  Arsuaga. Hay admiración entre ellos. Tomando el papel de Sancho, Millás permanece cercano a la realidad que les rodea, incluso sintiéndose comprometido en algunas situaciones. Como cuando entran en una juguetería. Pero jamás comenta su incomodidad, deseoso de saber, de comprender más. Y es que Juan Luis Millás afirma haber sido Paleontologizado. ¿Qué quiere decir? Fascinado, seducido, admirado por la Paleontología. Tras volver de una visita a Atapuerca, entró en su casa afirmando su familia más cercana: “vengo de ver a los abuelos”, tal era su emoción. Porque así era.

El Homo Antecessor ha sido reconocido como el eslabón entre el neandertal y sus homínidos coetáneos y el hombre actual. Millás reconoce sentirse más identificado con el neandertal. Porque, por ejemplo, siempre le ha extrañado el tema del habla, que la gente hablase y se entendiese le fascinaba. Admira a Arsuaga su capacidad de conceptualizar y de transmitir ideas, hasta el punto, que el escritor valenciano piensa que la palabra es uno de los sentidos de la vista. ¿Porqué? Porque, imaginemos por ejemplo que caminamos por la Sierra de Guadarrama. Vemos árboles. Sólo cuando alguien nos nombra: pinos, abedules… empezamos a visualizarlos de forma independiente. De esta forma se enriquece formidablemente nuestra mirada y con ella la visión del mundo.

Ingenuity/ingenio

Arsuaga reconoce en su pupilo las características del adjetivo Ingenuity. Un falso amigo del inglés porque, si en un primer momento lo traduciríamos como ingenuidad, erraríamos. No tiene en inglés ese significado, de hecho no existe ese concepto. La traducción de Ingenuity sería ingenio. Es una cualidad que Arsuaga reconoce en Millás. Pero ingenio, según la versión anglosajona, que rodea o está implícito en aquel que es considerado como ingenuo o que determinadas personas ven en su mirada un algo de inocencia, cuando en realidad, posee un gran ingenio. Así describiría Arsuaga a su compañero de paseos, libros y tertulias. Con ese ingenio que en el mundo hispano a veces se confunde con ingenuidad.

Sobre el futuro de la especie humana

El cambio climático preocupa mucho a Juan Luis Arsuaga

Cuando Arsuaga, una de las personas que más sabe de evolución humana en el mundo, es preguntado por el futuro de nuestra especie. Habla sobre la preocupación que le ocasiona el cambio climático. El 80% de nuestra especie, según sus palabras, vive en zonas donde se van a notar las consecuencias. Y parte de la responsabilidad es nuestra. Nunca, en millones de años, había un nivel tan algo de Co2 en la atmósfera.

Los Paleolíticos

La mayor intervención del humano a lo largo de su evolución tuvo lugar en el Neolítico. Cuando se pasó de vivir de forma nómada alimentándose de la caza y la pesca, a otra forma de vida: la sedentaria. Para Arsuaga la primera debió ser más divertida y de hecho, destaca, los hombre y mujeres del Paleolítico se adornaba, se acicalaban muchísimo. Así lo demuestran la enorme cantidad de fragmentos de conchas, plumas… que se han encontrado en las cuevas y galerías donde habitaron. “Cuando estás contento sales de compras, te regalas alguna colonia o ropa. Si estás deprimido, no te arreglas tanto”. Los homínidos del paleolítico eran más guapos, así nos lo dice su esqueleto. Eran atléticos, altos, fibrosos. Tanto las hembras como los machos. Que tenían casi el mismo tamaño. Los paleolíticos comían mucho caballo, había muchos caballos salvajes en la zona.

Los Neolíticos

Pero en el Neolítico, la cosa cambió. Los campos de cultivo que se ven en Atapuerca lo son desde hace 7000 años. Aquello, comenta Arsuaga, sí que fue una intervención radical. Desaparecieron gran cantidad de bosques y con ellos especies como rinocerontes, caballos salvajes, incluso elefantes. La tierra empezó a ser rasurada. El homínido neolítico se redondea. Deja de ser atlético, alto y fibroso. Al moverse menos y tener una alimentación menos variada habría casos de desnutrición. Los homínidos neolíticos que se van descubriendo en Atapuerca fueron los que cultivaron por primera vez la tierra. Aunque mucho más libre que lo que ahora se hace, no cree posible Arsuaga que existieran vedas, lo que ahora significa no cazar durante determinado tiempo al año hembras en tiempo de cría o que el fuego se usara para  aumentar los pastos y reducir el matorral. Eso no existía.

En Atapuerca no se han encontrado rastros del uso del fuego antes de los neandertales de hace 100.000 años.

El gran cambio

Para Arsuaga, que es casi como decir para la Paleontología, la vida fue más o menos igual en España durante milenios. Hasta los años 50 del siglo XX, cuando con los planes de desarrollo, se emigró masivamente del campo a la ciudad. Hasta entonces todo había permanecido más o menos igual, a como lo habríamos estado haciendo desde el Paleolítico. La gente se encontraría en el campo como ahora lo hacen en las ciudades. Porque todo el mundo viviría allí. Allí nacerían sus hijos, crecerían, envejecerían y morirían. Y las personas permanecieron durante años junto a los restos de sus antecesores, en el pueblo. Pero con la vida en la ciudad, se produjo el gran cambio.

Con la Pandemia hemos vuelto a sentirnos mortales

Sobre las consecuencias de la Pandemia, este eterno universitario, sabio, catedrático, Paleontólogo universal, reconocido en todo el mundo: Arsuaga, afirma que lo más destacable para él ha sido la vuelta a la mortalidad. El ser humano antes de la Pandemia había perdido la conciencia de la vida. De que sus hijos, ellos mismos morirían. La mayoría de la población vive en ciudades, donde el envejecimiento casi no se ve. Se cambia de amistades, de vecinos fácilmente. La gente va y viene a su conveniencia. Pero con la Pandemia ha vuelvo esa sensación de forma consciente, hemos vivido la muerte del vecino, del amigo, del compañero de trabajo. Recordándonos que estamos de paso, que somos mortales. Algo que ‘alivia’ a nuestro sabio, porque había demasiada venta de inmortalidad. Durante siglos nos la vendieron las religiones, las distintas religiones se basan en esto. Pero últimamente nos vendían inmortalidad a diario. Se daba por hecho que no moriríamos.

El Neandertal tuvo el tamaño cerebro más grande de los homínidos.

En círculos de Paleología también se está investigando teorías que hablan de que se está produciendo una gamificación de la sociedad, ver la vida como un entretenimiento. Nuestro cerebro se acerca en tamaño al cerebro de crías, de niños. Lo cual es cuando menos, destacable. Hoy un niño de seis años tiene cerebralmente las mismas capacidades cerebrales teóricas  que las de un adulto. O dicho a la inversa, el cerebro de adultos es similar al de niños. ¿Quizá eso explicaría el fenómeno mundial del fútbol? No se sabe a ciencia cierta.

Sí se puede afirmar, que se han ido primando los especímenes menos agresivos y más colaborativos. Que son los que han conseguido reproducir sus genes. De hecho, Arsuaga abre los brazos señalando al resto de comensales en el interior de un restaurante en Madrid, ¿no es esto el paraíso para un homínido del Paleolítico? Nadie pelea por la comida y todo el mundo está tranquilo esperando su turno.

Una juguetería, un parque infantil, la Sala de Musas del Museo del Prado y otros lugares, son la base para otras reflexiones entre Arsuaga y Millás en “La vida contada por un sapiens a un Neandertal”.

La Catedral de Burgos, creación gótica junto a pinos castellano leoneses, y el verde de un cuadro de Rothko como metáfora de la vida perdida en la naturaleza.

NOTA En la novela “La vida contada por un sapiens a un neandertal” de Juan Luis Arsuaga y Juan Millás se desarrollan otras muchas cuestiones no tratadas en este Club de Lectura Virtual.

Fuente: Fundación Atapuerca. Disponible en <https://www.atapuerca.org/&gt; [Consulta: septiembre 2021]

Burgos: la evolución humana en Atapuerca

La Sierra de Atapuerca, en Burgos, está rodeada de humedales, ecosistemas variados y con abundancia de cavidades para cobijarse. Desde hace casi un millón de años ha estado habitada. Situada entre la Sierra de la Demanda y la Sierra de Ubierna, entre los ríos Ebro y Duero. En la comarca burgalesa La Dureba. Con multitud de arroyos y cascadas que van a desembocar, a través de los ríos Oroncillo, Oca, Homino y Tirón al Ebro. En una llanura repleta de verdes y amarillos regada por estos ríos que la oxigenan y preñada de campos de cereales, ha sido transitada por manadas de mamíferos que eran seguidas por sus cazadores

Hoy Atapuerca es una gran fábrica de investigación, un motor económico que genera turismo de alto valor, una universidad de conocimiento y exporta la marca Burgos a todo el mundo. La sierra de Atapuerca es Patrimonio de la Humanidad porque concentra en un mismo espacio físico restos fósiles de la evolución humana, durante un millón de años, algo que, afirma Juan Luis Arsuaga, Director de Atapuerca “es insólito” Así lo reconoció la Unesco, pues cuando se presentó la candidatura, “fue instantáneo, no dudaron ni un día en reconocerla y todos estuvieron de acuerdo”. La mayor parte del tiempo humano lo hemos vivido en la Prehistoria y el único y mejor sitio para su estudio en todo el planeta se encuentra aquí.

En 2018 se cumplieron 40 años del descubrimiento oficial del Yacimiento de Atapuerca. Aquel primer año apenas unas decenas de estudiantes, entre ellos Carbonell escavaron durante una semana; en 2018 más de 200 alumnos de muy diversas nacionalidades pasan parte de sus vacaciones estivales en los yacimientos. Y en palabras de  Carbonell, «Atapuerca se ha convertido en una factoría científica única en el mundo».

¿Cómo se descubrieron los Yacimientos de Atapuerca?

Fueron Trinidad Torres y el grupo espeleológico Edelweiss quienes alertaron en la primera mitad del siglo XX de la importancia de este lugar. Donde, hacia principios del siglo XX, la construcción del paso de un ferrocarril minero, había abierto en canal, por la mitad, la sima de una pequeña montaña: Atapuerca. Saliendo a la luz las diferentes capas sedimentadas en forma de estratos que contenían restos fosilizados de la vida humana y animal que habian habitado esta región de España desde más un millón de años. También se dejaron al aire, el corte transversal de cuevas y galerías que hasta ese momento, habían permanecido selladas, intactas. Desde la Prehistoria.

El Paleontólogo Emiliano Aguirre fue el primero en excavar y en 1998 llegaron Carbonell, Bermúdez de Castro y un jovencísimo Juan Luis Arsuaga. Fue este trío de científicos bajo la dirección del primero quienes localizaron y dieron nombre al habitante más antiguo de Europa.

HOMO ANTECESSOR : un descubrimiento revolucionario

Reproducción en 3D de Joven Homo Antecessor

Carbonell codirector de Atapuerca, afirma que es una especie o sub especie hasta 1997 desconocida y a veces criticada. Pero que con la reciente secuenciación del adn de su esmalte dental, el descubrimiento es innegable. Esto ha sido posible gracias al trabajo del Grupo de Antropología Dental CEMEH con la doctora paleontóloga Cecilia García Campos. Así se ha confirmado que sí es una nueva especie. ¿Por qué es revolucionario este descubrimiento? que de hecho ya ha sido reconocido internacionalmente otorgándole su lugar en la evolución humana al Homo Antecessor y siendo publicado en la revista Nature.

Homo Antecessor es el antepasado común de los neandertales,Homo Antecessor es el antepasado común de los neandertales, los humanos actuales y los denisovanos

 

 Ilustración Tom Bjoöiklund

Bienvenida Chica de la Gran Dolina

 

Atapuerca es un tesoro. Cada año se da a conocer los descubrimientos más destacados y si a finales de los años 90 fue el Homo Antecessor Explorador en marzo de 2021 lo ha sido un cambio de sexo de chico a chica de la Gran Dolina. Este hallazgo ha sido también publicado en Journal of Anthropological Sciences ¿Por qué es importante el descubrimiento de la chica de la Gran Dolina? Porque hasta ese momento se pensaba que era un chico. Quedando así patente que las tareas de las hembras eran como las de los machos. Visibilizando a la mujer en la Prehistoria. ¿Cómo se ha conseguido? Con los análisis de adn realizados también  por el equipo de la paleontóloga Cecilia García Campos Grupo de Antropología Dental CEMEH, se demostraba  que en la Prehistoria las tareas de las hembras no estaban limitadas a procreación y cuidados. No había una separación entre dentro o fuera de la cueva. Las hembras prehistóricas, que tenían un tamaño muy similar a los machos, realizaban las mismas tareas de caza u otras tareas incluso  artísticas.

Afirma Eudald Carbonell i Roura (Ribas de Freser, Gerona, 17 de febrero de 1953) prehistoriador, arqueólogo, antropólogo, geólogo y paleontólogo español, Vicepresidente de Fundación Atapuerca, fundador del Institut Català de Paleoecología Humana i Evolució Social (IPHES) y Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica en 1997 junto a los Doctores Juan Luis Arsuaga y José María Bermúdez de Castro que El diformismo sexual de la hembra y el macho prehistórico es pequeño, según se desprende de análisis de huesos en Atapuerca, lo cual hace pensar que el comportamiento era muy parecido. A diferencia de otros primates en los que la diferencia de tamaño entre la hembra y el macho es mucho mayor, como es el caso de los gorilas

Según afirma Cecilia García Campos Grupo de Antropología Dental CEMEH la mayoría de los restos fósiles son de individuos  inmaduros, es decir, que todavía no han alcanzado la pubertad, lo que complicaba dar una estimación de su sexo. De ahí la grandeza del descubrimiento a través de los huesos dentales. De ahí la grandeza del descubrimiento a través de los huesos dentales.

NOTA En la novela “La vida contada por un sapiens a un neandertal” de Juan Luis Arsuaga y Juan Millás se desarrollan otras muchas cuestiones no tratadas en este Club de Lectura Virtual.

Fuente: Fundación Atapuerca. Disponible en <https://www.atapuerca.org/&gt; [Consulta: septiembre 2021]

Arsuaga y Millás, el ‘Dream Team’de la Divulgación Científica Paleontológica

LA PALEOGRAFIA COMO MATERIA DE LA LISTA DE LOS LIBROS MÁS VENDIDOS

En el mundo de la edición de libros ha venido ocurriendo en el último año una revolución, hasta ahora impensable. Resulta que la Ciencia Paleontológica, (aquella que estudia la evolución del ser humano a través de sus fósiles) interesa a centenares de miles de personas ocupando los primeros puestos en las listas de los ejemplares más adquiridos. Este giro inesperado en el cosmos de la publicación y despacho de libros,  ha sido realizado por el Catedrático de Paleontología, el biólogo Premio Príncipe de Asturias: Juan Luis Arsuaga y el escritor, periodista y creador del género informativo los articuentos : Juan José Millás. Y esta camarilla ha sido renombrada popularmente como el  Dream Team, o ‘equipo de ensueño’ de la divulgación científica paleontológica, en paralelismo con el universo  futbolístico.

La materialización del citado milagro ha sido el volumen titulado «La vida contada por un sapiens a un neandertal» editada por Alfaguara en septiembre de 2020. A través de dieciseis capítulos se nos van dando a conocer pinceladas clarificadoras de nuestro origen como especie humana. ¿De dónde venimos?, nos hace entender quizá mejor, quienes somos y pudiera ser que nos orientara hacia donde vamos. Un relato cerrado en cada capítulo que juntos forman una curiosa novela. De muy fácil lectura. Un contenido complejo explicado con un lenguaje diáfano y sencillo.

¿Quienes son los artífices de este prodigio?
Juan Luis Arsuaga, Catedrático de Paleontología de la Universidad Complutense de Madrid, biólogo, antropólogo;  Premio Princesa de Asturias 1996 y director de Atapuerca ; y  junto con él, el muy seguido por los lectores -con sus articuentos en el diario ‘El País’- , periodista y escritor premiado:  Juan José Millás. Juntos inspeccionan nuestra realidad actual conectando presente y pasado prehistórico de una forma sorprendente.

Porque, como dice Arsuaga, la Prehistoria o la evolución humana se ve más en nuestra vida cotidiana que en cualquier yacimiento . Con la lectura de este libro vemos en el ser humano de hoy rasgos que, siendo neandertales o sapiens, o anteriores, permanecen en nosotros, como quién arrastra  la forma de caminar de un bisabuelo o el color de pelo de un antepasado; la barbilla, las manos, el carácter o la inteligencia de un antecesor familiar del que ni siquiera se recuerda su nombre.

Juan Luis Arsuaga, aporta en la novela el contenido veraz con base científica de la evolución y el segundo, Juan Millás, le da la forma. En una permanente plática entre la ironía y la mayéutica del primero la ingenuidad y la extrañeza, del segundo. Estructurado en un diálogo que podría recordar o que pretende recordar, según los propios autores, a los que mantuvieran El Quijote con Sancho Panza o Sócrates con Platón. En este diálogo sobre Paleontología Arsuaga sería el Quijote, el sapiens, el ideal, el conocimiento; y Millás, sería, Sancho Panza, lo terrenal, el presente, el aquí y ahora. 

Y al final del libro, los lectores hemos mejorado como personas, somos más conscientes de nuestra existencia.

¿Cúal es el objeto de estudio de la Paleontología?

Los huesos. Los fósiles de la especie humana de hace cientos, miles o millones de años. Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua la Paleografía se define, como la: “rama de la antropología que estudia la evolución humana a través de los restos fósiles”.

¡Restos fósiles como contenido en los Top de libros más vendidos a nivel planetario!. Una ciencia criptica, compleja y minoritaria elevada al altar de la comunicación global de masas. Nadie se hubiera atrevido a soñarlo.

Juan Luis Arsuaga (Madrid, 1954-)

Aunque sí hubo alguien que lo deseó desde niño,  Juan Luis Arsuaga (en la foto de la izquierda en estos días). Hoy catedrático de Paleoantropología, y director del Centro UCM-ISCIII de Evolución y Comportamiento Humanos y colabora como director visitante con el Departamento de Antropología del University College of London. Y durante toda su infancia aprendiz de naturista, como lo fuera Darwin. También soñaba con ser un speaker como los ingleses. Y parece que ha conseguido ambas cosas. Vasco de corazón, Arsuaga siente adoración por el estudio de la evolución humana a través de los fósiles. Quizás por eso, por todos sus conocimientos mezcla pasado remoto y presente; en  una permanente evolución que no es lineal sino caótica. Porque mientras unos ya están evolucionados en un sentido, conviven con otros que todavía no, en una eterna pugna de la selección natural. 

Arsuaga / Juan Luis Arsuaga y Atapuerca

Hay que diferenciar entre el personaje Arsuaga y la persona Juan Luis Arsuaga,  al que vemos en la foto de la izquierda sosteniendo el cráneo del Homo Antecesor en los años 90 en el Yacimiento de Atapuerca. El primero, el personaje del libro, es un sabio (algo cercano a la realidad) que transmite su conocimiento de la forma lo más fácil que puede. En ello se esfuerza. Para que su pupilo, en este caso Millás, basado en el escritor y periodista Juan Luis Millás, capte de forma sencilla algo que, de hecho, es complejo.

Juan Luis Arsuaga versus Atapuerca

Bermúdez  de Castro  , Eudald Carbonel i Roura junto a Juan Luis Arsuaga ( en la foto) recogieron, estudiaron, ordenaron y difundieron los trabajos realizados en su origen por el Grupo Espeleológico Edelweiss y Trinidad Torres siendo el paleontólogo Emiliano Aguirre  el primero en realizar trabajos de campo en Atapuerca. Aquellos tiempos fueron duros, pero dieron sus frutos. A finales de los 90 Aguirre delega la dirección del trabajo de investigación de Atapuerca en los tres mencionados paleontólogos. El trabajo de investigación fue y es  intenso, como también lo es; y aquí radica su notoriedad, la divulgación de los hallazgos. 

En el año 200 la Unesco declaró Atapuerca Patrimonio de la Humanidad al ser considerado un referente obligatorio para cualquier estudio referente a la evolución de la humanidad. Como lugar único en el mundo para explorar los rastros dejados por nuestros antepasados hace más de millón y medio de años. Atapuerca es hoy además un Museo de la Evolución humana y Juan Luis Arsuaga su director y una de las personas que más saben sobre nuestra especie en todo el Planeta.

Millás / Juan José Millás (Valencia, 1946)

El personaje en la novela,  Millás, escucha las explicaciones del sabio y utiliza la ingenuidad y la extrañeza, realizando preguntas sencillas como forma de comprender. Pupilo preguntón, con muchas ganas de entender las explicaciones pero también es quién lleva hacia la realidad del momento al profesor Arsuaga. Éste, ajeno a veces a la sustantividad de la realidad real, inmerso en sus pensamientos y cómo transmitir la idea; provoca situaciones que contrarían al alumno. 

 

La primavera descrita por un adolescente

Juan José Millás nació en Valencia en 1946. Después de realizar estudios y otras actividades, finalmente se dedicó a la escritura. Siendo uno de los columnistas del diario EL PAÍS más seguidos donde escribe sus articuentos.  Breves relatos basados en la realidad con forma de cuento. 

Descubrió su vocación de escritor cuando realizaba el Bachillerato en el instituto, cuando, tras escribir una redacción sobre la primavera,  fue alabado por su profesor y sus compañeros. Nunca olvidó esa sensación. Así nació su vocación. También escribió con poco éxito, poesía;  pero este intervalo le sirvió para comprender la melodía de las palabras, según su propio relato.

El arte de la narración oral 

La genialidad de esta pareja de eruditos continúa, hay más. Porque juntos han creado un nuevo género literario. Y así, de forma quizás inconsciente, quizá no. Arsuaga y Millás re-crean el género literario escrito mediante la narración oral. Dedican parte de su tiempo a difundir lo que se conoce sobre la evolución humana a través de charlas-diálogos presenciales. Una conversación entre lo espiritual y lo terrenal, entre el erudito y el lego;   entre el sapiens y el neandertal.

Fuente: 

  1. La vida contada por un sapiens a un neandertal / Juan José Millás, Juan Luis Arsuaga.– 1ª ed.– Barcelona : Alfaguara, 2020.    216 p. ; 24 cm.
  2. Fundación Atapuerca . Disponible [https://www.atapuerca.org/] [septiembre 2021]

NOTA : en la novela “La vida contada por un sapiens a un neandertal” de Juan Luis Arsuaga y Juan Millás se desarrollan otras muchas cuestiones muy interesantes, no mencionadas en este Club de Lectura, para no desvelar el contenido del libro.